
Exposición Gervasio Sánchez “Visiones Saharauis” – Santander
Visiones Saharauis es la mirada de Gervasio Sánchez, a través de una treintena de imágenes y un audiovisual, sobre la situación actual del pueblo saharaui. Una mirada que nos habla de sus más de 45 años de resistencia a la ocupación marroquí, de las víctimas de minas, de las personas desaparecidas o de como se afronta la discapacidad en un campo de personas refugiadas.
Gervasio Sánchez, que ha trabajado como fotoperiodista en distintas zonas del planeta y ha vivido en primera persona distintas guerras y conflictos, cuenta con numerosos reconocimientos nacionales e internacionales. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) le nombró durante la celebración del 50 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en diciembre de 1998, ‘Enviado Especial de la UNESCO por la Paz’ por “el extraordinario testimonio que ofrece mediante la fotografía del calvario que padecen las víctimas de las minas antipersona y por su infatigable promoción de una cultura de la paz al sensibilizar a la opinión pública mundial sobre la necesidad de proscribir estas armas y de ayudar a los mutilados a reinsertarse en la vida cotidiana”.
La República Árabe Saharaui Democrática (R.A.S.D.), proclamada el 27 de febrero de 1976 tras la retirada de España y la ilegal ocupación de la antigua provincia del Sáhara español por Marruecos y Mauritania, administra los campos de población refugiada diseminados por la provincia de Tinduf, al suroeste de Argelia, y los territorios liberados separados de la parte ocupada por un muro de 2.700 kilómetros.
La mayoría de la población saharaui vive en tiendas de campañas o en casas de adobe de estructura muy frágil, carece de agua corriente o luz eléctrica y depende de la ayuda internacional para subsistir. Unos 400 saharauis han desaparecido desde principios de los años setenta en el marco del conflicto armado y la represión política llevaba a cabo principalmente por Marruecos contra la población civil bajo su control, pero también durante la administración española del territorio. Uno de cada 100 saharauis ha sido víctima de las minas. Una tercera parte de las víctimas sobrevivientes han sufrido amputaciones y más del 7% son paralíticos. Entre siete y diez millones de minas están sembradas a lo largo del muro construido por Marruecos.
Las fotografías fueron tomadas en los campos de refugiados de Tinduf (Argelia) y en las zonas liberadas del Sáhara Occidental durante los meses de marzo, setiembre y octubre de 2016 y en Zaragoza durante agosto del mismo año.
Se podría decir que nada ha cambiado desde el momento en que Gervasio Sánchez tomó esas fotos que ahora pueden verse en el Parlamento de Cantabria en una exposición fruto de la colaboración de Cantabria por el Sáhara y el Observatorio Aragonés de Derechos Humanos. El Pueblo Saharaui continúa padeciendo la ocupación marroquí y el exilio forzado en los campos de refugiados o en la diáspora. Y España y la comunidad internacional siguen mirando hacia otro lado y eludiendo sus responsabilidades.
Se podría decir,… si no fuera porque la pandemia COVID 19 ha agravado la situación humanitaria en los campos de refugiados, dificultando gravemente la llegada de la ayuda internacional e imposibilitando por segundo año consecutivo la celebración del programa Vacaciones en Paz.
Se podría decir,… si no fuera porque desde el pasado mes de noviembre, el enésimo incumplimiento por parte de Marruecos de las condiciones del alto al fuego vigente desde 1991, provocó la vuelta a la guerra, una situación silenciada por los grandes medios de comunicación.